lunes, febrero 25, 2008


MANILLAS DE BRONCE

Querido,


Las manillas de mi casa son de bronce

Recuerdas?

Redondas, clásicas, relucientes casi.


Manos y manos han tocado esas varitas mágicas

Ellas han dado paso a corredores oscuros,

A habitaciones verdes.


Antiguamente,

Las manos de un hombre doliente tocaban esas manillas

Mientras su mujer gravemente enferma

Reposaba en la habitación amarilla.


Antiguamente,

Las manos de un niño tocaban una a una esas manillas

Buscando sin fruto

El último juguete de acción que poseía.


Antiguamente,

Las manos de una mujer tocaban esas manillas

Para aprestar camas y baúles

En la ingrata espera de alguien que nunca llegaba.


Querido,


En la habitación verde toqué tu espalda

Espero que el penetrante olor del bronce

No haya traspasado tu cálida piel


Lo que no aseguro

Es que aquellas manos todas

Incluyendo las mías

Abandonen alguna vez las curva de tus pliegues.

martes, febrero 12, 2008


LOS PIES DE ANITA

Los dedos largos
La pata grande, mejor dicho
La pisada eterna
Su pie calze lo que calze me calza
Los pies de Anita no son otra cosa sino
Sus raíces
Soy una de ellas una de esas culebreras,
Una de esas bien crespas.

Los pies de Anita son del empeine elegante
Aunque tenga callitos
Aunque los bototos los cubran
Anita tiene los pies de Anita
Un pie bañado de ríos y Rius
Un pie inquieto
Un pie que puede entrar en lava ardiente
Anita calza los horizontes.

Anita de a uno pisa los cerros
Las playas
Las veredas
Anita no pisa, sino que tienta
El suelo, la nube
Y si usa tacos suporte se alarga aún más
Un trazo de amores parte de sus
Tacones que se alzan hasta el sol.

Y si las converse le sudan los pies a Anita
Ella baila
Ella gime
Ella goza
Sus pies dorados rodean un niño
Un hombre
Un camino
Un Hada, Anita de pies deslcazos.